Otros síntomas menos frecuentes que afectan a algunos pacientes son los dolores y molestias, la congestión nasal, el dolor de cabeza, la conjuntivitis, el dolor de garganta, la diarrea, la pérdida del gusto o el olfato y las erupciones cutáneas o cambios de color en los dedos de las manos o los pies, tal y como recoge la web de la OMS, que apunta que «estos síntomas suelen ser leves y comienzan gradualmente. Algunas de las personas infectadas solo presentan síntomas levísimos».
Las lesiones cutáneas identificadas durante la primera ola, catalogadas en cinco tipos: maculopapulares, vesiculosas, urticariformes, pseudoperniosas (similares a sabañones) y livedo-reticularis-necrosis, no están siendo observadas en lo que llevamos de segunda ola
«La enfermedad puede presentarse también con síntomas relacionados en el fallo cardiaco o el daño miocárdico agudo