El grupo de gobierno del Ayuntamiento de Pájara reclama al Cabildo de Fuerteventura “una solución urgente y definitiva a los cortes de agua” que están sufriendo los vecinos de pueblos como Cardón, Valle de La Lajita o La Pared, que llevan días sin abastecimiento.

«Los vecinos nos trasladan su cansancio porque cada vez que llegan a casa no tienen agua para afrontar el día, desde poner una lavadora hasta duchar a los niños”, lamenta la concejala de Aguas, Dunia Álvaro, quien añade que “se trata de una situación tercermundista».

El Consistorio sureño ha trasladado reiteradamente esta situación al consejero de Aguas de la Corporación insular, Carlos Rodríguez, tanto a través de reuniones como de conversaciones telefónicas, sin que se haya adoptado ninguna medida para paliar esta situación.

“El consejero lo soluciona todo con cubas de aguas y con continuas disculpas que son insuficientes; cuando no se ha roto un motor se ha roto una tubería y el Ayuntamiento ha tenido que poner cubas para suplir la carencias del Consorcio de Abastecimiento de Agua de Fuerteventura (CAAF) en depósitos como el de La Pared, pero hay otros a los que no llega el agua”, asevera además el alcalde, Miguel Ángel Graffigna.

A los cortes en el suministro cotidiano se une la falta de agua a negocios que se ven obligados a tirar de garrafas de agua para poder abrir sus puertas. Y la falta de agua afecta especialmente al sector primario del valle de La Lajita, el Cardón o Tarajal de Sancho, que están viendo cómo se pierden cosechas o no pueden dar de beber al ganado por la falta de líquido.

Dunia Álvaro insiste en que “nos encontramos ante una situación límite a la que el Cabildo de Fuerteventura debe poner una solución urgente; las buenas palabras tienen que ir acompañadas de hechos porque los vecinos sufren cada día estos cortes y la respuesta siempre es la misma».

La concejala advierte de que este martes el Valle de La Lajita o La Pared ya no tienen agua. «Nos preguntamos si esto es un castigo del Cabildo a Pájara por no gobernar aquí o si su pretensión es privatizar el CAAF; en ambos casos, el vecino es el que paga las consecuencias y encontrarán a este gobierno municipal en frente», concluye Álvaro.