Se trata de un plan que tiene por objetivos mejorar las políticas y las prácticas para prevenir la aparición de basura marina a partir de actividades vinculadas al turismo o de tipo lúdico. Más específicamente, el proyecto estará focalizado en reducir o impedir que se generen determinados tipos de basuras costeras, como son los materiales usados para comidas rápidas o en eventos recreativos multitudinarios (por ej., cubiertos plásticos o vasos desechables), a consecuencia de un comportamiento inadecuado de los consumidores y a su vez, por falta de incentivos o de infraestructuras adecuadas para la prevención, recogida y reciclado de basuras.
El proyecto implica a administraciones, centros de investigación, autoridades y organizaciones sociales de zonas costeras de Portugal, España, Francia, Croacia, Grecia, Bulgaria, Alemania y Holanda, en las cuales el turismo costero es una actividad económica clave, que no sólo puede verse afectado por la basura marina, sino que puede incrementar la presión en las infraestructuras locales y generar grandes cantidades de residuos plásticos.
Así, a través de este proceso de intercambio de experiencia y aprendizaje mutuo trans-europeo, los socios de CAPonLITTER van a desarrollar mecanismos para mejorar sus políticas locales y, al mismo tiempo, promover la implementación de buenas prácticas, con la participación activa de actores locales claves.
Entre las acciones a desarrollar, se contribuirá a que futuros eventos en playas y zonas costeras tengan operativos sus planes específicos de “plástico cero”, como ya se viene aplicando en la celebración del Campeonato de Windsurf y Kitesurf de Fuerteventura, lo que conllevará a una mejora significativa en la prevención, la recogida y el reciclado de basuras en las distintas zonas costeras. En este sentido, los resultados principales se incorporarán dentro del Plan de Acción de la Reserva de Biosfera de Fuerteventura y, por ende, en el Plan de Economía Circular y el Plan Estratégico de Turismo de Fuerteventura para la prevención de basuras marinas. Así mismo, estos avances en la reducción y gestión de los plásticos formarán parte de la base de datos de buenas prácticas del Grupo de Trabajo en Plástico Cero de la Red Mundial de RdB de Islas y Costas.
El Cabildo de Fuerteventura, a través de su Consejería de Medio Ambiente que dirige Marlene Figueroa, adquiere el compromiso de colaborar con dicho proyecto por un valor de 1.300.000 euros a desarrollar durante cinco años con actuaciones en los seis municipios de la isla. “Desde la Consejería existe la voluntad de convertir a Fuerteventura en un modelo de ‘Cero plástico’ como una de las acciones contra el cambio climático, dentro de un Plan de Economía Circular, donde se fomente la innovación ecológica y la participación ciudadana”.
La idea, que arranca el próximo 5 de octubre en Lisboa, es mejorar en la reducción del plástico con actividades que ya se han realizado anteriormente y el objetivo final es que tengan una proyección mundial.