‘Agua, agüita, la gente está sequita’, por Sun Tzu

OPINIÓN

Sun Tzu dice: “Un comandante hábil busca la victoria de la situación, y no la demanda de sus súbditos”.

Y como bien dice Sun, los comandantes del Cabildo y CAAF (Consorcio Anormal de Aguas de Fuerteventura), han buscado la victoria de la situación sin hacer caso a las demandas de sus súbditos. Les importa muy poco que usted, caballero, pueda lavarse sus axilas después de su dura jornada laboral, o usted señora, pueda lavarse su hermoso pelo. Tal vez quieran cambiar el modelo higiénico y obligarnos a lavarnos con menos frecuencia. Aunque yo no lo creo, todo el mundo sabe que son accionistas mayoritarios de empresas de toallitas y partidarios de que nos lavemos en la marea, sin jabón claro, y del conocido baño checo.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha presentado las bases para mejorar las rutinas del baño, indicando cómo deben ser las duchas. Duchas cortas. Lo que la OMS no sabe es que es imposible seguir su modelo en Fuerteventura, a no ser que compres tu garrafita diaria de agua del supermercado o tengas un pozo de agua salobre. Hasta las madres vuelven a utilizar el método de mojarse con saliva el dedo gordo de la mano para limpiar la cara de los niños. Sé que me tildarán de exagerado, pero en el tema del agua somos una isla del segundo mundo rozando el tercero.

Dice la OMS: “5 minutos de ducha y rapidito”. Nada de baños de inmersión que suben hasta loa 200 litros de agua. Y aquí es cuando los vecinos de cualquier pueblo de Fuerteventura, incluso los de algún barrio de la capital, gritan a coro un “AJOLÁ”. La mitad de los días del año falla la red de abastecimiento, teniendo que recurrir a los famosos camiones aljibes, como si estuviéramos en los años 60 o 70.

La ducha perfecta según la OMS:  95 litros en duchas de 5 minutos. La ducha perfecta, según el majorero es con agua. Con un chorrito nos vale. Con un chorro como el que sale en el Junquillo seriamos los más felices del mundo, más que los finlandeses, que llevan dos años seguidos siendo los más happies.

Los españoles pierden más de 10 minutos duchándose y alcanzan el 42% de los habitantes de nuestro país, mientras las mujeres se duchan en 20 minutos y exceden estos límites llegando al 13%. Una madre majorera entraría chola en mano en el baño y repartiría más reveses que Rafa Nadal en el Roland Garros. Los efectos de la ducha en la relajación de las personas, beneficios en la tonificación de los músculos, liberación de malos olores, activación de la circulación sanguínea y otras ventajas en la piel, en Fuerteventura, se ven reducidas drásticamente, o porque no hay agua o porque la chola de la vieja silba amenazante a tu alrededor como en un tiroteo.

El gasto en exceso del agua se compensa con las personas que solamente se duchan 3 veces a la semana, siendo el porcentaje actual 1 de cada 4 habitantes. Se debe tener en cuenta que este problema no afecta al conocido por todos “jediondo”, a ese le da igual los cortes de agua.

42 años de distintos gobiernos, el Consorcio de Abastecimiento de Aguas de Fuerteventura se funda en el año 1977, y no ha conseguido todavía que esta isla, abandonada por la mano de Dios, tenga una red de agua aceptable.

La primera bomba de agua se le atribuye a Arquímedes que la describió en el siglo III a.C. Vaya fiera. Diez acueductos suministraban agua a la antigua ciudad de Roma y la abastecían con alrededor de 140.000 metros cúbicos de agua al día. Qué máquinas. Los egipcios en el año 1500 a.C. utilizaban la sustancia química Alum compuesta por sulfato de potasio o aluminio que hoy en día se sigue usando para procesos de coagulación en las potabilizadoras modernas. Qué listos. Aristóteles diseña la primera máquina para desalar el agua, una evaporadora. Esta servía a los barcos griegos para conseguir agua dulce en sus travesías. Qué monstruo.

Y aquí en el siglo XXI no son capaces ni de garantizar que salga un chorrito de agua en nuestras casas cada día del año. Que inútiles.

Por qué siempre nos quedaremos con los más tontos de la clase. Como me gustaría que los responsables de esta histórica chapuza, de esta desidia inoperante y galopante, no pudieran bañarse, ducharse o remojarse en su casa durante un mes seguido. Que las moscas los persiguieran haciendo un escrache siguiendo el olor a colonia ‘Eau de Machorro’.

“AJOLÁ”

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